Consejos para cuidarnos los pies en el camino de Santiago

¿Estás pensando hacer el camino de santiago? Todos sabemos que es una de las mejores actividades al aire libre, deporte y turismo en una misma actividad. Pero...OJO!!No cuidarse los pies puede hacer que el camino se convierta en una pesadilla. Normalmente se hacen entre 20 - 25km diarios, por lo que tenemos que prepararnos unos meses antes para acostumbrar a nuestro cuerpo y a nuestros pies. Aquí te dejo algunos consejos:

1. Hidratar los pies todos los días. una piel hidratada no se rompe y evita rozaduras y ampollas. 

2. No estrenar zapatillas esos días

3. Llevar dos pares de zapatillas

4. Utilizar calcetines técnicos, sin costuras, que ayuden a transpirar y mantengan los pies secos. 

5. Usar chanclas en zonas comunes para evitar el contagio de hongos y papilomas

6. Lavar bien los pies con agua y jabón y si quieres puedes usar gelenes relajantes.

7. MUY IMPORTANTE: estirar la musculatura de todo el cuerpo haciendo hincapié en piernas y pies

Materiales necesarios para el cuidado de los pies en el camino.

En el camino como en cualquier ruta, es esencial cuidar de nuestros pies para mantenerlos enérgicos y sin molestias. Por eso, te presento un kit de supervivencia para el cuidado de las ampollas. 

1. Apósitos de hidrocoloide, como compeed que protegerá tu ampolla.

2. Agujas estériles

3. Gasas

4. Clorhexidina

5. Esparadrapo 

6. Crema hidratante

7. Geles relajantes quien lo desee.

 

 

Cómo curar las ampollas

Procedimiento: Lave cuidadosamente la ampolla con agua y jabón para eliminar la suciedad y las bacterias que pueda presentar la zona. 

Con la aguja estéril pinchar la ampolla, un poco solo, es simplemente para que salga todo y que no te haga presión al caminar.  NUNCA QUITAMOS LA PIEL.

Con la clorhexidina o cualquier desinfectante que llevemos, desinfectamos la zona y protegemos la ampolla con el apósito  mencionado anteriormente. 

Cuidado y limpieza continua. Este procedimiento hay que hacerlo diariamente hasta que la ampolla esté totalmente curada. 

Si la ampolla se infecta o empeora, es importante acudir a un podólogo para recibir tratamiento adecuado. 

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